ARLOS GIMÉNEZ, de profesión, contador de tebeos,
como a él mismo le gusta definirse, reanuda una de sus mejores series
que popularizó hace ya más de 20 años en la revista
Rambla y posteriormente en
“Comix Internacional”, que editará
Josep Toutain a principios de los años ochenta.
Tres nuevas historias que nos sumergen en una época gloriosa
de la producción de historietas en España para la
agencia “Selecciones Ilustradas”. Giménez nos relata
con su habitual maestría, las bromas pesadas que se gastaban dentro
de la agencia, como muestra, el protagonista de una de las historias del
álbum, Pol Foch y unos pequeños problemillas con sus
originales a la hora de entrar a dibujar en la agencia, o aquellas interminables
veladas de trabajo, en compañía de buenos amigos, con una
cancioncilla tan querida por todos, “Mi gran noche” de Adamo,
que haría las delicias de todos los allí presentes. En lo
que sí estaban de acuerdo, por una vez, era en la admiración
que sentían hacia Marilyn como mito erótico y de cómo
les afecto su trágica muerte.
Como bien nos cuenta Carlos, la profesión de dibujante
no estaba por aquella época exenta de guiones enrevesados, con lo
que eso suponía a la hora de ponerse a dibujar una historieta; para
muestra lo que le pasa al bueno de Peribáñez en ésta
cuarta entrega, en su búsqueda por encontrar un editor para la publicación
de sus guiones, se enfrentaba ante un panorama nada halagüeño,
cada uno de ellos, se caracterizaba de unas peculiaridades que desanimaban
al pobre Peribañez en su intento por salir adelante.
Una vez más el autor de “Los Profesionales”, nos brinda
unas buenas historias, que perdurarán en nuestra memoria por mucho
tiempo. Muy pronto más peripecias de este grupo de profesionales
en dos nuevos álbumes, con los que el autor tiene pensado cerrar
el ciclo, desde aquí las esperamos ya con impaciencia. De lo mejor
del cómic actual.
*Javier Mesón es editor de la web
"El Coleccionista de Tebeos", dedicada al mundo del cómic.
