ADA DÍA se vienen conociendo resultados contradictorios de las elecciones bolivianas del Domingo 30 de junio. Los últimos sondeos oficiales al 86% muestran un virtual triple empate entre el ex-presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, el ex-alcalde cochabambino Manfred Reyes Villa, y el líder indio cocalero Evo Morales Ayma.

Lo máximo que podrá sacar cada candidato serán unos 600,000 votos (menos de un cuarto de los sufragios y de un sétimo del electorado). El futuro gobierno 2002-2007 será decidido por los 157 parlamentarios.

Si Morales queda entre los dos finalistas es seguro que su otro contrincante será el ungido. Sánchez y Reyes defienden el modelo de libre mercado creado en 1985 mientras Morales quiere derogarlo.

En caso que la disputa quede entre Sánchez y Reyes, el primero se siente con más ventajas. Su Movimiento Nacionalista Revolucionario tiene entre 40 y 50 escaños mientras que la Nueva Fuerza Republicana de Reyes, el Movimiento Al Socialismo y el Movimiento de Izquierda Revolucionaria tendrían cada uno una treintena de curules.

Sánchez anhela volver a palacio con el apoyo del oficialismo, mientras que Reyes llama a formar un bloque con el MIR y el MAS contra los 'partidos del sistema'.

El problema para Reyes es que el MAS no quiere negociar con él pues le acusa de ser un ex-militar derechista que participó en la 'narco-dictadura' 1980-82.

Paz Zamora del MIR es la cuarta vez que candidatea y que no vuelve a quedar entre los 2 primeros puestos. Sin embargo, su partido nuevamente posee la llave para decidir quien será el nuevo ejecutivo.

El MIR ha demostrado que ha sido capaz de haberse coaligado con todo el espectro político nacional. En 1971 nació castrista y guerrillerista; en 1982-85 co-gobernó con el MNR de Izquierda y el Partido Comunista; en 1985-89 apuntaló al gobierno MNR; en 1989 se alió con Bánzer (quien les persiguió durante su dictadura 1971-78) para que éste les llevase a la presidencia hasta 1993; y en 1997-2002 gobernó con el banzerismo.

La paradoja para 8 millones de bolivianos es que al final la elección de su gobierno recaerá en una treintena de parlamentarios de un movimiento errático minoritario.